martes, 9 de febrero de 2010

Cortan la luz por impago a un edificio del Servicio Murciano de Salud

Iberdrola mantuvo sin electricidad a las oficinas situadas en la Torre Jemeca durante más de dos horas
09.02.10 - 01:01 -
J. P. PARRA / J. MOLLEJO MURCIA. / La Verdad

Eran aproximadamente las diez de la mañana cuando los ordenadores y las luces de la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Murciano de Salud (SMS), en la Torre Jemeca de Murcia, se apagaron repentinamente ante el estupor de los trabajadores. Durante una hora nadie fue capaz de entender lo que estaba pasando. Sobre las once, alguien abrió una carta de Iberdrola y se despejaron las dudas: la compañía eléctrica había cortado la luz por impago. El SMS, que debe diez millones de euros en facturas de la luz, se puso en contacto con la empresa para reconducir la situación, y poco después de las doce los despachos de la dirección de Recursos Humanos volvieron a estar iluminados.
Así explican fuentes de Sanidad lo que ocurrió ayer en la Torre Jemeca. «Desconocíamos que se iba a producir el corte de luz, y además no lo entendemos, porque en este momento las facturas se están pagando y lo que queda por solucionar es la deuda acumulada, de diez millones de euros, un asunto sobre el que la negociación está ya muy avanzada», explica la Consejería. Iberdrola, por su parte, no quiso hacer declaraciones.
En 2005, la compañía eléctrica ya amenazó con cortar la luz si el Servicio Murciano de Salud no pagaba una deuda de algo más de tres millones de euros. Pero los impagos fueron acumulándose, e Iberdrola volvió el año pasado a elevar su protesta. Las dos partes «renegociaron las condiciones de la deuda», explicó en ese momento Sanidad. Sin embargo, los problemas siguen presentes y buena parte de las facturas de la luz están sin pagar, así que todo indica que a la empresa se le ha acabado la paciencia y ayer decidió dar un toque de atención. El corte afectó a las oficinas de la Torre Jemeca y no al resto de las numerosas dependencias del Servicio Murciano de Salud. Tanto en la sede central de la calle Pinares como en la Consejería se siguió funcionando con normalidad durante toda la jornada. Además, el suministro eléctrico a los hospitales y centros de salud está garantizado y no hay riesgo alguno de cortes que puedan afectar a la asistencia sanitaria.
Dificultades del SMS
La situación financiera del Servicio Murciano de Salud es complicada. El organismo se comprometió a pagar tres de los diez millones de euros que debe a Iberdrola. Pero tiene serias dificultades para saldar completamente la deuda en un momento en que los ingresos de la Comunidad han caído y la Consejería de Hacienda ha cortado el grifo de las aportaciones extraordinarias que en otras ocasiones han salvado situaciones similares. El de ayer es, pues, el último capítulo de una serie de problemas que se arrastran desde hace tiempo. La sanidad pública regional consiguió acabar el año 2009, financieramente hablando, a duras penas. Hasta el punto de que en verano dejó de pagar el 20% de la factura farmacéutica, y no ha saldado su deuda hasta este año. La decisión provocó la airada protesta del Colegio de Farmacéuticos de la Región, que pese a todo no tuvo más remedio que aceptar la situación.
Un final agónico
El Servicio Murciano de Salud también dejó de pagar a los centros concertados por los pacientes que se derivan de la pública. Fue un último trimestre agónico, pero el principio del nuevo año no parece que esté siendo mucho mejor. Aunque los presupuestos de Sanidad han aumentado, tal y como defiende la Consejería, la mayoría de ese incremento ha ido destinado a hacer frente al aumento del gasto en personal, que en 2008 alcanzó los 939 millones de euros, más de la mitad del presupuesto de ese año. En luz, gas y servicios, el coste fue de 103 millones de euros. Además, el Servicio Murciano de Salud tiene que hacer frente a una deuda de 370 millones de euros con sus proveedores. La Comunidad cerró un acuerdo con los bancos que permite ahora a las empresas cobrar las nuevas facturas a seis meses, pero la deuda pendiente sigue sin resolverse.
Para reducir costes, Sanidad impulsa una plataforma logística, que ya ha adjudicado provisionalmente a Hefame, y una central de compras que centralizará la compra de materiales y productos para todos los hospitales y centros de salud. Los pequeños y medianos proveedores se oponen, porque creen que no podrán competir con las multinacionales y estarán abocadas al cierre. Agobiados con su situación económica, han hecho frente común y han llamado a las puertas de San Esteban para que Valcárcel les ofrezca una salida.