Miles de alumnos se quedan fuera de la titulación preferida en la primera criba de la universidades públicas
14.07.11 - 00:52 - La demanda de plazas apabulla a las universidades públicas de la Región, que lo tienen muy complicado para casar su oferta de vacantes con la avalancha de solicitudes presentadas en la primera fase del proceso de admisión. Las dos universidades públicas (Universidad de Murcia y Politécnica de Cartagena) han ofertado este año poco más de 7.000 plazas, y la demanda se acerca a las 19.000 solicitudes.
Si a las universidades les resulta matemáticamente imposible dar respuesta al aluvión de demandas, ofrecer a los aspirantes un puesto universitario en el grado que han elegido como primera opción se antoja una utopía. En las titulaciones sanitarias la competencia se ha puesto imposible. Medicina es el grado más codiciado: 3.146 estudiantes murcianos lo han pedido en primera opción, y solo hay 200 plazas disponibles. En Enfermería, 1.123 aspirantes han peleado por 238 plazas. Esas cifras de aspirantes solo incluye a los estudiantes que han pedido los grados en primera opción; si se suman los que los han demando en segunda o tercera, los de otros distritos universitarios o los mayores de 25 y 40 años, el número de peticiones se desboca.
El descuadre entre la oferta y la demanda se repite en casi todas los grados sanitarios, como Odontología, Farmacia, Fisioterapia o Veterinaria, que tendrán que dejar fuera a centenares de alumnos.
Si bien es cierto que esos grados siempre han recibido más solicitudes de las que podían atender, este curso se han rebasado todas las marcas. A las titulaciones sanitarias se han sumado otras como Criminología, que dispone de 70 plazas para casi 1.500 aspirantes (en primera, segunda o tercera opción); o Psicología, donde medio millar de estudiantes se disputan 191 vacantes. El grado de Educación Primaria también se encuentra entre los más peleados, con más de mil aspirantes para 500 plazas. Incluso títulos que en la última década dejaban puestos vacantes todos los años por falta de demanda, como Filología Clásica, tendrán que desechar este curso a una docena de alumnos.
Los datos de estas primeras listas de admitidos, en cualquier caso, hay que mantenerlos en 'cuarentena' al menos hasta septiembre, ya que en estos momentos las dos universidades se encuentran en la primera fase del proceso de admisión, que incluye a muchos demandantes de otras comunidades que finalmente renunciarán a la plaza; y a otros que han conseguido un puesto en la carrera que eligieron en primera opción y dejarán su hueco en la que tienen asignada. Así, cuando comience el curso los excluidos serán muchos menos, y habrá aumentado considerablemente el total de estudiantes con plaza en su primera opción.
El aluvión de solicitudes tendrá reflejo en las notas de corte del próximo curso, que serán más altas, ya que las marca la calificación del último alumno que entra en el año anterior. Las provisionales para el próximo curso (que pueden consultarse en la ficha que acompaña esta información) ya han experimentado una subida destacada. Así, en las titulaciones que más solicitudes han registrado, en 2012 será todavía más difícil conseguir un puesto sin una calificación media buena.
La falta de expectativas laborales y el desempleo están detrás de la elevada demanda de plazas, ya que muchas solicitudes están presentadas por mayores de 25, 40 o 45 años, titulados en otras carreras que quieren ampliar su formación o graduados en FP que no encuentran empleo y deciden prolongar su etapa formativa.
