La Policía Judicial intervino en los distintos registros realizados al exconsejero y ex delegado del Gobierno Francisco Marqués, imputado en el 'caso Zerrichera', el proyecto de evaluación de impacto ambiental de una central nuclear y varias cajas con jamones ibéricos, así como 43.500 euros en billetes de 500 y un sobre de la Consejería de Sanidad y Política Social con la anotación «consejero 20.000E /200». Así se recoge en las actas levantadas durante el registro judicial, que aparecen en las diligencias sobre presunta corrupción urbanística del 'caso Zerrichera'.
Según explican estas actas, Marqués guardaba las cajas de jamones en el trastero de su vivienda en Murcia, donde los agentes encontraron también 43.500 euros en billetes de 500 euros. Además, los integrantes de la comisión judicial intervinieron en un coche propiedad de la empresa Hefame, en la que trabaja el exconsejero, una carpeta que contenía «un proyecto de evaluación de impacto ambiental de una central nuclear y una planta desaladora de agua en el término municipal de Fuente Álamo de Murcia». También se encontró en el coche una carpeta que contenía legislación varia sobre centrales nucleares, añade el acta judicial.
El documento indica que uno de los registros se llevó a cabo el 4 de marzo de 2009 y en el mismo estuvo presente, además de Marqués , que se encontraba entonces detenido, su letrado defensor, el catedrático de Derecho Penal Jaime Peris. Tras levantar el precinto colocado en la entrada a la vivienda, el registro comenzó en el recibidor de la casa, donde los agentes se incautaron de un dossier «con múltiples anotaciones de precios y facturas de equipamientos de muebles».
Tras la inspección en otras dependencias del inmueble, dos cerrajeros que habían sido llamados al efecto procedieron a abrir la caja fuerte que se encontraba en un armario de pasillo, y en cuyo interior fue hallado un sobre abierto vacío. En el mismo figuraba el logotipo de la Consejería de Sanidad y Política social y la anotación «Consejero 20.000E/200».
A continuación, la comisión judicial se dirigió a los trasteros, ubicados en la zona de aparcamiento, en uno de los cuales hallaron un libro de Física y Química «y una bolsa de plástico negra con 87 billetes de quinientos euros, así como varias cajas con jamones ibéricos con dos etiquetas». En otro registro, que se había efectuado unas horas antes en el mismo lugar, fueron intervenidas varias escrituras y otra documentación diversa, como contratos de arrendamiento y facturas, así como anotaciones manuscritas. En ese primer registro, efectuado a primeras horas de la mañana, la comisión judicial encontró un cheque bancario de Bankinter por valor de 377.640 euros, fechado en febrero de 2007.
En uno de los miles de folios que integran la causa se recoge el acta del registro efectuado al día siguiente en la vivienda de Marqués en Águilas. La inspección duró apenas cinco minutos, y el documento señala que «una vez se accede al interior, se comprueba con linternas que no hay luz, que no hay muebles en ninguna de las dependencias y que la casa está vacía». El 4 de marzo se efectuó otro, en este caso, en el chalé de Francisco Marqués en Móstoles (Madrid), y en la mayor parte de sus dependencias no se encontró «nada relevante para el objeto de la causa», según se indica en el acta levantada por la secretaria judicial.
Tras levantarse el secreto que pesaba sobre estas actuaciones que desarrolla el Juzgado de Instrucción número Tres de Murcia, los imputados disponen de veinte días para presentar los recursos que estimen oportunos.