La Guardia Civil detiene en Mazarrón a uno de los presuntos cabecillas de la red y en Lorca a otro de sus integrantes
05.01.11 - 01:00 -
AGENCIAS | MURCIA./ la Verdad
Golpe policial a una banda que introducía de forma ilegal en España a mujeres rumanas a las que luego obligaba a prostituirse en las carreteras de Torrevieja y en la comarca de Orihuela. La 'Operación Hydra', desarrollada en Murcia y Alicante, ha logrado destapar que la banda llegaba, incluso, a cambiar a las mujeres por coches. Dos de los ocho arrestos realizados por la Guardia Civil se han producido en la Región, en Mazarrón y Lorca. Entre ellos estaba uno de los presuntos cabecillas de la banda.
Las víctimas de esta organización eran, según informó ayer el Instituto Armado, captadas en Rumanía por compatriotas suyos residentes en la localidad alicantina de Torrevieja quienes, con falsas promesas de trabajo, las convencían para trasladarse a España. Una vez que llegaban a España, la red les retiraba la documentación y bajo amenazas, a ellas o a sus familiares en Rumanía, las obligaban a ejercer la prostitución callejera.
Las investigaciones de la 'Operación Hydra' se iniciaron en octubre de 2009 cuando los agentes de la Benemérita averiguaron que una banda, que hasta entonces estaba especializada en el robo de viviendas, se estaba dedicando a la explotación sexual de mujeres rumanas y al tráfico de drogas en zonas de ocio de la costa alicantina.
Los agentes identificaron en Orihuela-Costa y en Mazarrón a dos ciudadanos albaneses, supuestos cabecillas de la organización, que contando con la colaboración de una mujer, también de nacionalidad rumana, ejercían el control sobre las mujeres. En el momento del desmantelamiento la banda 'explotaba' a siete mujeres, pero se cree que haya podido controlar hasta una veintena.
Una veintena de víctimas
Durante la operación, la Guardia Civil ha realizado cuatro registros domiciliarios en Orihuela-Costa, Mazarrón y Lorca, en los que ha intervenido nueve kilogramos de hachís, teléfonos móviles, dinero en efectivo y documentación falsa. La operación se ha saldado con la detención de ocho personas de diversas nacionalidades -cinco rumanos, dos albaneses y un marroquí-. En concreto, dos de los arrestos se practicaron en Mazarrón, donde se detuvo a uno de los supuestos cabecillas de la red, y en Lorca.