martes, 21 de abril de 2009

Peñalver declara que se le revolvieron las tripas cuando dio dinero por primera vez

El imputado clave de la 'Operación Biblioteca' detalla cómo pagaba al alcalde y al concejal Señala que le pedían comisiones para el partido, las fiestas y el equipo de balonmano
M. BUITRAGO MURCIA/ La Verdad
La primera entrega de dinero que se realizó presuntamente al alcalde y al teniente de alcalde de Librilla, José Martínez García y Pedro Martínez Muñoz, respectivamente, hizo que se «le revolvieran las tripas» a Domingo Peñalver, que entregó el dinero a su socio para que éste lo hiciera llegar a ambos ediles. Así figura en la larga declaración de más de seis horas que el empresario Peñalver, copropietario de la firma Acadi, realizó el viernes pasado ante el juez Andrés Carrillo. Este primer pago, de 30.00 euros, fue reclamado inicialmente por Pedro Martínez para el partido. Ambos políticos fueron expulsados en enero del PP. No han abandonado sus actas municipales.
En el interrogatorio, Peñalver hizo un relato pormenorizado de las ocasiones en las que había entregado dinero entre los años 2005 y 2007 a José y a Pedro Martínez, así como a José Andrés Cortes, gerente de la empresa municipal Iniciativas para el Desarrollo de Librilla (IDL). Peñalver relató que uno de los pagos se hizo en el propio despacho del alcalde, y que en otra ocasión el primer edil le reclamó directamente 40.000 euros, según ha podido saber La Verdad de fuentes judiciales.
PRESUNTA TRAMA DE LUCRO
Dentro de la Operación Biblioteca por presunta corrupción en Librilla, el titular del juzgado número 6 de Murcia, Andrés Carrillo, imputa a Domingo Peñalver su participación en «una presunta trama de empresas destinadas a la consecuención de contratos públicos de manera irregular para de este modo lucrarse, por mediación de estas empresas, y pagar comisiones a funcionarios públicos».
Desde que se destapó la operación, en noviembre pasado, Peñalver no ha puesto reparos en contar todo lo que sabía, involucrando a otros imputados, entre ellos el alcalde y el concejal de Urbanismo. La lista de imputaciones alcanza hasta ahora a 22 personas. Acadi, controlada por Peñalver y José Luis Cano, consiguieron al parecer muchos contratos públicos convocados por el Ayuntamiento y la empresa municipal IDL a cambio del pago de comisiones ilegales, según apuntó la instrucción.
PARA EL PARTIDO O LAS FIESTAS
Peñalver ha corroborado lo que ha venido publicando La Verdad en los últimos meses, con la particularidad de que ha contado con detalle seis pagos de los que él tuvo conocimiento, en tanto que el dinero salía de Acadi conforme recibía los contratos de IDL. Relata que el primero que le pidió dinero fue el teniente de alcalde, Pedro Martínez, a finales del año 2005. «Al principio eran cosas como que necesitaban dinero para el partido o para la fiestas y para el equipo de balonmano. Le dijo inicialmente que necesitaba 30.000 euros para el partido. Lo primero que hizo el declarante (Peñalver) fue ir a hablar con José Luis Cano y fue cuando le dijo que era normal porque estaban trabajando mucho y les habían echado una mano. Fue entonces cuando quedaron en el Bar Mulligans José Luis Cano y el declarante porque (este último) había acordado verse allí con Pedro Martínez y José Martínez». Peñalver añade que le dio el dinero a José Luis Cano «y supone que este último se lo entregaría a los otros dos porque el declarante como se le resolvían las tripas y se fue», señala la declaración.
PEDRO Y PEPE
En otra ocasión, a mediados de agosto del 2007, Domingo Peñalver cuenta que pagó otra cantidad a Pedro Martínez en el despacho del alcalde. Explica que fue a su regreso de vacaciones en Suiza. Peñalver se pasó por el Ayuntamiento. «Pedro lo montó en el coche y le dijo que iban a ver unas obras. Entonces le dijo que 'Queremos lo nuestro'. Hablaban en plural tanto Pedro como Pepe el alcalde porque siempre hablaban de los dos y Pedro nunca le habló de que quisiera para José Andres (gerente de IDL)». Le dijo que estaban gastando «mucho en fiestas y en el partido y que necesitaban 60.000 euros», refleja la declaración de Peñalver.
Este último les contestó que no podía sacar ese dinero de la cuenta así porque sí y que lo pagaría en una semana. «Fue a finales de agosto o principios de septiembre de ese año y lo pagó en el despacho del alcalde a Pedro».
'NIVELAR' LOS PAGOS
El alcalde José Martínez también pidió directamente dinero, según Peñalver, que a lo largo de su declaración dio fechas aproximadas. Indicó que habían quedado a la entrada de Librilla, en una calle sin asfaltar, en el coche de alcalde, un Peugeot amarillo. Refiere que sucedió en septiembre del 2007, después de darle al primer teniente de alcalde los 30.000 euros. Explica que lo «llamó Pepe el alcalde» para la tramitación ambiental del PGOM de Librilla. «Le dijo que cuándo le iba a dar a él su parte: Que quería 40.000 euros porque era el alcalde y el que más estaba trabajando». Peñalver declara que una semana después le dio 40.000 euros en el lugar de la cita «directamente en un sobre». El empresario añadió que el alcalde y el concejal se habían puesto de acuerdo porque ambos le llamaron diciéndole que Pedro tenía 10.000 euros menos de los que le tocaban, ya que a uno le había dado 40.000 y a otro 30.000 . Los niveló pagando a Pedro «en el Ayuntamiento».
DINERO PARA EL GERENTE
Sobre el gerente de IDL, José Andrés Cortés, el socio de Acadi declara que le dio 30.000 euros dentro de una carpeta, en un encuentro a mediados de octubre del 2007 «en el polígono industrial Cabecicos Blancos, donde lo estaba esperando con el Volkswagen Tuareg». Añadió Peñalver que se lo comunicó a su socio José Luis Cano. Este último le decía que «no se podía dejar de lado a la gente después de lo que había caído en el periódico (La Verdad desveló la supuesta trama en el año 2007) porque seguían pagando e IDL todavía le debía mucho dinero a Acadi.
Como ha publicado este diario, Peñalver reiteró al juez que solían pagar era entre un 10 ó 15% «de lo que en cada ocasión IDL hubiera pagado a Acadi». Añade que su socio José Luis Cano «en una ocasión le llegó a pedir 100.000 euros para la gente de IDL».