BMN no descarta ahora que necesite ayudas públicas «como última instancia» para aumentar el colchón del crédito inmobiliario
15.05.12 - 01:08 -
M. BUITRAGO / M. J. A. | MURCIA./ La Verdad
Las exigencias del último decreto del Gobierno para darle mayor cobertura a los créditos inmobiliarios 'sanos', la máxima tensión en los mercados y la advertencia de que podría repetirse el 'caso Bankia' son los factores que han influido en la suspensión de la reunión prevista para ayer tarde entre el Ministerio de Economía y los bancos medianos BMN, Liberbank, Unicaja e Ibercaja con el objetivo de tratar posibles fusiones a dos o cuatro bandas. A media mañana se supo que la reunión había quedado aplazada sin fecha, como adelantó laverdad.es. Los representantes de estas cuatro entidades no han recibido explicaciones.
Las expectativas que se habían generado con esta reunión es otra de las causas, en el sentido de que la falta de acuerdo podía haber generado mayores tensiones en los mercados, aunque diversas fuentes financieras explican que el encuentro no tenía como finalidad cerrar negociaciones, sino abordar el decreto del viernes y analizar en qué situación estaban los contactos mantenidos en las últimas semanas con vistas a posibles integraciones, entre ellas las de BMN y Liberbank. Las conversaciones estaban paralizadas días antes del Consejo de Ministros, cuando BMN admitió que se habían producido contactos con Liberbank, pero sin llegar a acuerdos. La situación actual es de impasse.
El Ministerio de Economía está empujando a estas entidades a redimensionarse, aunque algunos analistas consideran que el tamaño no es tan importante, sino la viabilidad. Las dos reformas bancarias que ha aprobado el Gobierno central este año obligan a estas cuatro entidades a provisionar 6.700 millones de euros, por lo que alguno de estos grupos podría entrar en pérdidas, ya que el nuevo esfuerzo para aumentar las provisiones ha hecho que se replanteen las cuentas, motivo de más para aplazar la reunión de ayer. El Ministerio de Economía podría estar molesto porque se hubiera filtrado la cita, publicó 'El País', aunque tal convocatoria se conoció la semana pasada y el cambio de criterio no fue notificado hasta ayer por la mañana.
A distintas velocidades
BMN, presidido por Carlos Egea e integrado por Cajamurcia, Caja Granada, Sa Nostra y Caixa Penedés, tendrá que provisionar 640 millones de euros de colchón para hacer frente a la posibilidad de que crezca la morosidad en el ladrillo sano. Este grupo está centrado ahora en consolidar su integración y en la subasta de Banco de Valencia. Asimismo, los otros tres bancos están inmersos en sus propios procesos de reestructuración a distinta velocidad. Como la situación de los distintos bancos de cajas es muy diferente, y los procesos de integración no están ni mucho menos concluidos, una mega-fusión tendrá enorme complejidad. Tanto como las condiciones impuestas por la última reforma financiera planea la nacionalización parcial de Bankia como consecuencia de una fusión mal diseñada. El Ministerio de Economía no quiere que se repita algo parecido con estos cuatro bancos.
El caso es que las cifras de las provisiones inducen a replantearse los impactos en nuevos procesos de integración de estos cuatro grupos que aglutinan a a su vez a quince entidades: Unicaja, Caja Jaén, Caja España, Caja Duero, Caja Murcia, Caixa Penedés, Caja Granada, Sa Nostra, Ibercaja, CAI, Caja Círculo, Caja Badajoz Cajastur-CCM, Caja Extremadura y Caja Cantabria. El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, había instado, días atrás, a Liberbank, BMN, Ibercaja y Unicaja-CEISS a explorar las posibilidades de una fusión global o, al menos, de dos en dos.
Hasta el día 30
Dado que estos grupos van a tener que detraer de sus cuentas de resultados un total de 6.700 millones de euros, una cantidad tan abultada llevaría a pérdidas a las entidades o a pedir dinero adicional al FROB. El Gobierno ha prolongado el plazo hasta el 30 de junio para adoptar este tipo de decisiones. Mientras tanto, a la agencia de calificación Moody's le parece «positiva», pero no «definitiva» la nueva fase de reforma bancaria emprendida. En un informe emitido este lunes, celebra las exigencias de saneamiento del crédito promotor 'sano', pero también advierte de la vulnerabilidad de muchos bancos españoles, afectados por la recesión en curso y su impacto en la economía real. Recuerda que la morosidad de las hipotecas de particulares y de los créditos al consumo seguirá creciendo por el aumento del paro, y que el frenazo económico afectará al reintegro de los préstamos por parte de las pymes. Ninguna de estas circunstancias está cubierta por el real decreto, comenta.
Medidas de BMN
A requerimiento de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, BMN sacó ayer una segunda nota aclaratoria para explicar de qué forma piensa conseguir los 640 millones de dotaciones adicionales para aumentar sus provisiones, en las que no descarta que tenga que recurrir a ayudas públicas en últimas instancia para mantener el 8% de capital principal. Fuentes del grupo explicaron que las medidas previas funcionarán para evitar recurrir al FROB. El pasado viernes, en una primera valoración, apuntaron que no necesitarán ayudas públicas. En la primera nota remitida el domingo por la noche a la CNMV, dijo que el impacto de la nueva regulación sería de 640 millones de euros, pero no dio detalle de cómo iba a conseguir el dinero. Solo dejó claro que estaba «analizando las medidas» para poder cumplir con la normativa aprobada el viernes por el Gobierno.
En la segunda nota aclaratoria de ayer reconoce que debe tomar medidas para mejorar su ratio de capital, que se encontraba en el 8,95 % a finales del año pasado. El impacto de la nueva normativa situaría el capital principal a 0,54 puntos para alcanzar un coeficiente del 8 por 100, al que está sujeto el Grupo, señaló a la CNMV. Entre las medidas, habla de la posibilidad de generar capital de manera interna, y de reducir su exposición al riesgo, así como emitir títulos que le mejoren los ratios de capital. «En ultima instancia y hasta la cuantía necesaria», añade la entidad en una nota, se emitirán bonos convertibles que serán adquiridos por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), tal y como recoge el real decreto ley 9/2009, informa Efe. Ésta es precisamente la vía de ayuda pública que se ha articulado para dar apoyo a las entidades que no puedan por si solas cumplir con los requerimientos. Por esta emisión de bonos convertibles, BMN estará obligada a pagar al FROB cerca de un 10 % anual, y deberá recomprarlos antes de cinco años o el Estado nacionalizará la entidad, informa Efe.
Banco de Valencia
El 98,99% de los accionistas de Banco de Valencia ha aprobado la entrada del FROB en el capital mediante un aumento de hasta un máximo de mil millones de euros, lo que supondría alrededor del 91 % de la participación. Banco de Valencia está en un proceso de subasta en el que está implicado BMN, que pretende adquirirlo para ganar tamaño.
Antes de la votación en la Junta de Accionistas de la entidad, el FROB había pedido el apoyo a esta propuesta. Está revisando las actuaciones de los anteriores gestores del Banco de Valencia y que iniciará en fechas próximas «alguna acción legal significativa» si detecta irregularidades.