Los primeros beneficiados serán los miles de acreedores de la Comunidad, que podrán cobrar a partir de junio
Después de varias semanas de incertidumbre, el Consejo de Política Fiscal avala el Plan de Reequilibrio de la Región de Murcia y del resto de comunidades, excepto Asturias
M. Buitrago/ La Verdad
La buena noticia es que los 4.000 acreedores de la Comunidad Autónoma podrán cobrar sus facturas a partir del mes que viene con la aprobación ayer tarde del Plan de Reequilibrio Financiero. La mala noticia es que a la misma hora en la que el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) daba luz verde a los planes de ajuste todas las comunidades autónomas, excepto Asturias, la agencia Moody's degradó la calificación de cuatro regiones dejando la de Murcia a la altura del 'bono basura', lo cual hará más difícil conseguir financiación en los mercados de deuda.
La incógnita de las últimas semanas sobre la viabilidad del plan de ajuste de la Región de Murcia quedó despejada por el ministro Cristóbal Montoro y su equipo, que calificaron el Plan Bernal de «serio y riguroso» durante la reunión del CPFF. Los técnicos del Ministerio no han tocado ninguna cifra; ni del montante total de 623 millones ni tampoco de los capítulos de gastos y sobre todo de nuevos ingresos. En el caso de Andalucía, por el contrario, se realizó un ajuste adicional de urgencia de 300 millones, en una habitación aparte, porque inicialmente su plan estaba suspendido, junto con el de Asturias. El Gobierno en funciones del Principado tendrá que presentar nuevas medidas.
Viene la parte más difícil
El Gobierno regional respiró con alivio después de la presión sufrida en las últimas semanas, en las que se puso en la picota el plan de Murcia como uno de los candidatos para ser intervenido. El vicepresidente Juan Bernal respondió con insistencia a las dudas con su convencimiento de que se aprobaría en la primera vuelta, como ha sucedido. Dicho plan encierra un choque de opiniones: los recortes son una opción mal recibida por los ciudadanos, y al mismo tiempo son la única herramienta que conceden el Ministerio y la Unión Europea para que cobren los acreedores y se evite la asfixia financiera de la Comunidad Autónoma.
Las medidas tienen que ser creíbles, y su desarrollo se hará bajo la estricta vigilancia del Ministerio. La parte más difícil viene ahora, ya que hay que ejecutar la totalidad del plan y no sobrepasar el 1,5% de déficit en diciembre. Los consejeros asistentes a la reunión, dirigida por el ministro Montoro y su equipo, han destacado el esfuerzo que han hecho todas las regiones para cumplir lo que les pide el Gobierno y proyectar así una buena imagen de España en el exterior. Juan Bernal asistió acompañado por el secretario general de la Consejería, Miguel Ángel Blanes.
El vicepresidente se mostró satisfecho «dentro de lo que cabe». «Se ha dado un paso importante y ahora hay que ejecutar el plan. Esto parecía una montaña hace dos meses y tras el respaldo del Consejo vamos cubriendo etapas», declaró. «Nos queda un trabajo duro por hacer, pero este paso era fundamental porque garantiza que los proveedores van a cobrar. Es la tranquilidad que tengo. El ministro está comprometido para que cobren en junio, y ha comunicado que va a hacer el esfuerzo necesario para que sea así», añadió.
Según Bernal, las adhesiones de los proveedores al plan de pagos del ICO «va por buen camino». Se han incorpora facturas por valor de 670 millones de euros, frente a un total de 1.150 millones reconocidos. El consejero apunta que en los próximos días intensificarán los contactos con los proveedores que quedan para advertirles de que el plazo concluye el día 22. Hay empresarios que se muestran remisos a este plan porque no reconoce los intereses de demora. La Consejería responde que es la única fórmula para que puedan cobrar de inmediato. Bernal recalca que la línea abierta por el ICO y los bancos para saldar las deudas «supondrá una importante inyección en la economía regional».
Cada consejero defendió su plan en la enorme mesa redonda del 'Ecofín Nacional', con las notas disonantes de Asturias y Andalucía, que aprobó 'in extremis'. Dejar fuera a la mayor región española habría enviado un mensaje negativo a la Unión Europea y a los mercados, por lo que el acuerdo era inevitable políticamente.
«Yo he justificado por qué nuestro plan era bueno, serio y comprometido con el objetivo del 1,5%», añade el consejero. La Región tiene enfrente una empinada cuesta porque debe rebajar en doce meses el déficit del 4,3% del año pasado. «Somos consciente de que hay que recuperar la confianza de los mercados y de la Unión Europea, y me parece muy importante que todas comunidades hayamos hecho un trabajo serio, porque es lo mejor para España. Todos los planes han sido revisados a fondo por los servicios del Ministerio».
«Retorno positivo»
Señala que los técnicos de Montoro han hecho pocas precisiones a las cuentas murcianas. «No nos han hecho cambiar nada. Nuestro plan ha salido totalmente inmaculado, con las mismas propuestas y números iniciales, tal y como fue redactado. Nos hicieron cuantificar algunas medidas relacionadas con la venta de inmuebles y los reales decretos sobre educación y sanidad».
El responsable económico de la Comunidad insistió en que desde el primer momento en que se remitió el plan siempre ha tenido un «retorno positivo» con el Ministerio. «Hemos realizado un trabajo riguroso y así lo ha destacado el secretario de Estado durante la reunión al referirse a la Región de Murcia. Tener el respaldo del CPFF nos permitirá volver a la senda de la sostenibilidad presupuestaria».