M. BUITRAGO MURCIA/ La Verdad
¿Es seguro circular por el Puerto de la Cadena cuando llueve? Los mejores expertos en geotecnia del país acudirán a Murcia para inspeccionar el Puerto de la Cadena y comprobar en qué estado se encuentra la montaña que abraza uno de los principales ejes de comunicación de la Región. El objetivo es evitar que se vuelvan a producir desprendimientos como los de pasado domingo, que afectaron a cinco vehículos, entre ellos el del presidente de la Comunidad Autónoma. Los geólogos creen, en un primer análisis, que existe relación entre las piedras caídas en el Puerto y en Torregüera, al otro lado de la cadena montañosa.
La Delegación del Gobierno y la Demarcación de Carreteras del Estado atribuyen la causa a las persistentes lluvias que se iniciaron el sábado por la noche y continuaron a lo largo del domingo. No creen que las obras de ampliación de la calzada, ni tampoco las que se realizan ahora para construir la variante de la Venta de la Paloma, hayan afectado a la estabilidad de la montaña y de los taludes y muros de contención. Lo atribuyen, de entrada, a un corrimiento de tierras y piedras en lo alto de la montaña, aunque las conclusiones finales dependen de una investigación técnica que está en marcha.
El Puerto de la Cadena ha estado tranquilo durante los últimos quince años. En 1994 se ejecutó el principal proyecto de estabilización de los taludes, después de unos desprendimientos que arrastaron 50.000 metros cúbicos de material sobre la carretera. El Ministerio puso manos a la obra y construyó muros de contención, barandillas, mallas, una pérgola y cunetones para la recogida de piedras.
Este diseño se mantuvo y perfeccionó con las recientes obras de ampliación de los tres carriles en cada sentido, aunque no han evitado el episodio del domingo.
Los primeros desprendimientos que se produjeron por la mañana arrojaron tierra y piedras del tamaño de un puño. Se retiraron 30 kilos de material. La Delegación del Gobierno señala que se hizo una inspección meticulosa y que el retén de Carreteras regresó a las 7 de la tarde. Nada hacía prever que fuera a pasar lo que sucedió dos horas después, según la Delegación del Gobierno.
Tras el accidente con el coche del presidente se desplazó al lugar una inspección formada por ingenieros de la Demarcación. Se realizó el corte preventivo de un carril de circulación durante la noche. Se retiraron las piedras sueltas y se montó una vigilancia especial que se mantuvo durante el día de ayer.
La Demarcación de Carreteras quiere que el Puerto de la Cadena esté tranquilo al menos otros quince años. Ha llamado a un equipo de expertos en geotécnica, los mejores del país, que realizará un chequeo a toda la montaña.
La Delegación del Gobierno y la Demarcación de Carreteras del Estado atribuyen la causa a las persistentes lluvias que se iniciaron el sábado por la noche y continuaron a lo largo del domingo. No creen que las obras de ampliación de la calzada, ni tampoco las que se realizan ahora para construir la variante de la Venta de la Paloma, hayan afectado a la estabilidad de la montaña y de los taludes y muros de contención. Lo atribuyen, de entrada, a un corrimiento de tierras y piedras en lo alto de la montaña, aunque las conclusiones finales dependen de una investigación técnica que está en marcha.
El Puerto de la Cadena ha estado tranquilo durante los últimos quince años. En 1994 se ejecutó el principal proyecto de estabilización de los taludes, después de unos desprendimientos que arrastaron 50.000 metros cúbicos de material sobre la carretera. El Ministerio puso manos a la obra y construyó muros de contención, barandillas, mallas, una pérgola y cunetones para la recogida de piedras.
Este diseño se mantuvo y perfeccionó con las recientes obras de ampliación de los tres carriles en cada sentido, aunque no han evitado el episodio del domingo.
Los primeros desprendimientos que se produjeron por la mañana arrojaron tierra y piedras del tamaño de un puño. Se retiraron 30 kilos de material. La Delegación del Gobierno señala que se hizo una inspección meticulosa y que el retén de Carreteras regresó a las 7 de la tarde. Nada hacía prever que fuera a pasar lo que sucedió dos horas después, según la Delegación del Gobierno.
Tras el accidente con el coche del presidente se desplazó al lugar una inspección formada por ingenieros de la Demarcación. Se realizó el corte preventivo de un carril de circulación durante la noche. Se retiraron las piedras sueltas y se montó una vigilancia especial que se mantuvo durante el día de ayer.
La Demarcación de Carreteras quiere que el Puerto de la Cadena esté tranquilo al menos otros quince años. Ha llamado a un equipo de expertos en geotécnica, los mejores del país, que realizará un chequeo a toda la montaña.
