«La gente compra mucho porque piensa que tras una catástrofe debe llegar la alegría», confirma el lotero Francisco Javier Sánchez
Lorca vive la mejor campaña extraordinaria de Navidad a causa de la tragedia del terremoto
G. Badía/ la Verdad
«Desde 1933 es la campaña más fuerte, porque la gente piensa que después de una catástrofe debe venir una alegría». De esta forma explica el propietario de la administración número 1 de Lorca, en Pío XII, Francisco Javier Sánchez, la campaña histórica que están protagonizando las siete administraciones lorquinas: han pasado de los 27.860 billetes que tenían asignados en octubre por Loterías y Apuestas del Estado (LAE), a disponer de 32.495 billetes en ventanilla. Una cifra récord en el sorteo extraordinario de Navidad en la Ciudad del Sol.
En concreto, fue en noviembre cuando las administraciones lorquinas recibieron esta consignación extra de 4.635 billetes, valorados en 928.000 euros. Esta cifra, sumada a los 5.572.000 euros de la consignación inicial -ya recaudada-, ofrece hasta la fecha la posibilidad de recaudar un total de 6,5 millones, sin contar la venta en terminales.
El delegado comercial de LAE en Murcia, José Laorden, a falta de conocer mañana los resultados oficiales, asegura que «Lorca lidera el aumento de ventas; desde algunas administraciones nos hablan ya de un incremento del 40%, que nosotros estimamos será del 25% de media. Se superarán los 6 millones de euros».
A estas cifras también han contribuido los dos puntos de venta mixtos de Lorca. En administraciones como la número 1, Francisco Javier Sánchez, pese a haber apurado hasta el final realizando un último pedido el 13 de diciembre, solo cuenta con 1.200 décimos disponibles en ventanilla. «Algunos me los han enviado desde Madrid, de otras administraciones, que los habían devuelto». En el caso de la administración número 2, llamada 'El Gordo', en la calle Corredera, les quedan 1.000 décimos pese a que desde noviembre han pedido dos remesas semanales de lotería. El propietario, Claudio Montiel, calcula que este año las devoluciones en su administración «serán de 56 billetes, lo que supone un 0,1%. Desde que mi abuela abrió en 1962 no hay comparación con la actual campaña».
La explicación a estos datos oficiosos es evidente: el terremoto de mayo. «Días después de la catástrofe, la gente ya estaba demandando lotería», recuerda José Laorden, quien mantiene la esperanza de que «pueda darse el caso excepcional de que Lorca venda el cien por cien de sus billetes». Un extremo complicado, pero no imposible, ya que las peticiones comenzaron en mayo y «la lotería en Lorca llegó a agotarse en noviembre», y hubo que reponer. Sin olvidar el aluvión de peticiones que están llegando desde Cataluña «y las excursiones desde Alicante, Albacete, Almería, Vera, Pulpí, Cieza, Abarán, Murcia... para comprar en ventanilla 50 décimos; algo inaudito». A la 'fiebre' lorquina también se han sumado empresas como el Grupo Pikolinos de Elche, «retirando 600 décimos del tirón». Ha habido pedidos incluso desde Suiza.
«No tenemos décimos»
A pesar de que hasta las 22 horas de hoy, miércoles, se pueden seguir retirando décimos para el sorteo de Navidad, en administraciones lorquinas como la número 8 del barrio Alfonso X El Sabio ya pueden decir eso de 'no hay billetes'. La lotera Ana Bastida confiesa que «he vendido el último décimo este martes; ahora vendo con el terminal», un dato doblemente significativo si se tiene en cuenta que Ana perdió dos meses de ventas «porque el terremoto obligó a demoler mi administración, que estaba en el número 57 de la carretera de Granada, en el barrio de La Viña». Los cimientos del edificio no aguantaban y hubo que demolerlo. Solo sobrevivieron la terminal, la caja fuerte y la mascota: una bruja.
Por lo que se refiere a la crisis económica, tiene dos caras para la venta de lotería, según Laorden. «La mayor caída se ha registrado en el sector empresarial y los murcianos juegan la mitad que en 2010, pasando de cuatro a dos décimos íntegros, y el resto en participaciones». Pero la otra cara es que hay «nuevos jugadores, como universitarios y jóvenes que pueden permitirse algún décimo». De forma oficiosa, Laorden cree que tras el sorteo extraordinario de 2011 lo normal «será que se mantenga la caída de ventas del 2% del pasado año». De los 529.812 billetes asignados a la Región en 2011, «el 70% se vende fuera de la administración y el 30% en ventanilla».