Quedan encima de la mesa porque la reforma de la Carta murciana no se aprobará en esta legislatura, pese a los propósitos iniciales
26.09.10 - 02:07 - M. BUITRAGO MURCIA. / La Verdad
Tendrá que esperar a la próxima legislatura. La reforma del Estatuto de Autonomía de la Región de Murcia se ha quedado estancada en la Asamblea regional en la recta final de este periodo parlamentario. No queda margen para que PP, PSOE e IU presenten en el Congreso de los Diputados un texto consensuado con las nuevas aspiraciones de autogobierno de los murcianos, la ampliación de la carta de derechos, la reclamación del agua y de los trasvases por la vía estatutaria (para frenar nuevos intentos desde Castilla-La Mancha), la necesidad de asegurar mejor financiación del Estado y la reivindicación de la deuda histórica con fórmulas más imaginativas.
Uno de los temas que se han quedado sobre la mesa es el catálogo de nuevos derechos de los murcianos. Los representantes de todos los ámbitos de la sociedad murciana que han comparecido ante la Comisión especial para la reforma del Estatuto han formulado un sinfín de derechos propios para los ciudadanos de esta tierra que han formado una lista de 109 propuestas de lo más variado. Los grupos parlamentarios tendrán que hacer una selección y reducir el número antes de que queden reflejadas sobre el papel, aunque primero deben decidir si se incluyen o no. Todo indica que sí.
Entre los derechos figuran algunos como el etiquetado de determinados productos para realzar las señas de identidad o destacar sus cualidades. Otros reclaman el derecho de atención ante los desastres naturales. También hay espacio para las modalidades lingüísticas, como el panocho, que algunos consideran una lengua propia. En este caso, se trataría de otorgarle más reconocimiento.
Fácil acuerdo
Hace justo un año que los tres portavoces parlamentarios impulsaron los trabajos para que la nueva Carta regional estuviera en el Congreso durante esta legislatura. No va a ser a así. La Región se quedará a la cola en la carrera de los Estatutos de nueva generación, algo que no preocupa a los representantes políticos.
No se atisban obstáculos relevantes que impidan un acuerdo, ni quiera en los temas más peliagudos. Lo que ocurre es que no hay tiempo en el calendario de la Asamblea. Ahora tocan los presupuestos autonómicos, enero es inhábil y en marzo acaba la legislatura para encarar las próximas elecciones. Así lo reconocen los portavoces de los tres grupos parlamentarios, al igual que el presidente de la Cámara, Francisco Celdrán.
«En un momento hubo un fuerte impulso para la reforma de todos los Estatutos del mundo mundial. Nosotros, en principio, no teníamos prisa ni especial interés porque nuestro Estatuto era en aquellos momentos el más moderno de España y estaba recién reformado, aunque no nos cerramos en banda porque cualquier norma es mejorable», declara Celdrán. «Debido a la presión que había accedimos a entrar en el asunto y nos pusimos a trabajar. Constituimos una Comisión donde recibimos a un montón de gente y pusimos el procedimiento en marcha... y hasta aquí hemos llegado. No imputo ninguna responsabilidad, positiva o negativa, a ningún grupo parlamentario. Las últimas reuniones las tuvimos antes del verano, en las que hablamos de los derechos de los murcianos. Se pusieron 109 derechos encima de la mesa y ahora hay que cribarlos y ponerlos por escrito. Pero no hay mucho tiempo. Sin que oficialmente se haya declarado extinta la Comisión, sabemos que ya no es posible porque se acaba la legislatura en marzo».
Doctrina del Constitucional
El presidente de la Asamblea explica que el Tribunal Constitucional se ha pronunciado a favor de incluir derechos propios siempre y cuando se refieran a las competencias de cada comunidad autónoma. «En el catálogo hay derechos sui generis porque la doctrina del Constitucional dice que es posible. Muchos comparecientes en la Comisión, como los sindicatos, nos aconsejaron que incluyéramos ese catálogo de derechos y luego cada grupo hará sus propuestas. Los servicios de la Cámara ha realizado un estudio comparado con otras comunidades autónomas».
Celdrán apostilla que la Comisión para la reforma del Estatuto ya no se va a convocar porque la actividad de la Asamblea acaba en marzo, y antes está el debate de los presupuestos autonómicos.
26.09.10 - 02:07 - M. BUITRAGO MURCIA. / La Verdad
Tendrá que esperar a la próxima legislatura. La reforma del Estatuto de Autonomía de la Región de Murcia se ha quedado estancada en la Asamblea regional en la recta final de este periodo parlamentario. No queda margen para que PP, PSOE e IU presenten en el Congreso de los Diputados un texto consensuado con las nuevas aspiraciones de autogobierno de los murcianos, la ampliación de la carta de derechos, la reclamación del agua y de los trasvases por la vía estatutaria (para frenar nuevos intentos desde Castilla-La Mancha), la necesidad de asegurar mejor financiación del Estado y la reivindicación de la deuda histórica con fórmulas más imaginativas.
Uno de los temas que se han quedado sobre la mesa es el catálogo de nuevos derechos de los murcianos. Los representantes de todos los ámbitos de la sociedad murciana que han comparecido ante la Comisión especial para la reforma del Estatuto han formulado un sinfín de derechos propios para los ciudadanos de esta tierra que han formado una lista de 109 propuestas de lo más variado. Los grupos parlamentarios tendrán que hacer una selección y reducir el número antes de que queden reflejadas sobre el papel, aunque primero deben decidir si se incluyen o no. Todo indica que sí.
Entre los derechos figuran algunos como el etiquetado de determinados productos para realzar las señas de identidad o destacar sus cualidades. Otros reclaman el derecho de atención ante los desastres naturales. También hay espacio para las modalidades lingüísticas, como el panocho, que algunos consideran una lengua propia. En este caso, se trataría de otorgarle más reconocimiento.
Fácil acuerdo
Hace justo un año que los tres portavoces parlamentarios impulsaron los trabajos para que la nueva Carta regional estuviera en el Congreso durante esta legislatura. No va a ser a así. La Región se quedará a la cola en la carrera de los Estatutos de nueva generación, algo que no preocupa a los representantes políticos.
No se atisban obstáculos relevantes que impidan un acuerdo, ni quiera en los temas más peliagudos. Lo que ocurre es que no hay tiempo en el calendario de la Asamblea. Ahora tocan los presupuestos autonómicos, enero es inhábil y en marzo acaba la legislatura para encarar las próximas elecciones. Así lo reconocen los portavoces de los tres grupos parlamentarios, al igual que el presidente de la Cámara, Francisco Celdrán.
«En un momento hubo un fuerte impulso para la reforma de todos los Estatutos del mundo mundial. Nosotros, en principio, no teníamos prisa ni especial interés porque nuestro Estatuto era en aquellos momentos el más moderno de España y estaba recién reformado, aunque no nos cerramos en banda porque cualquier norma es mejorable», declara Celdrán. «Debido a la presión que había accedimos a entrar en el asunto y nos pusimos a trabajar. Constituimos una Comisión donde recibimos a un montón de gente y pusimos el procedimiento en marcha... y hasta aquí hemos llegado. No imputo ninguna responsabilidad, positiva o negativa, a ningún grupo parlamentario. Las últimas reuniones las tuvimos antes del verano, en las que hablamos de los derechos de los murcianos. Se pusieron 109 derechos encima de la mesa y ahora hay que cribarlos y ponerlos por escrito. Pero no hay mucho tiempo. Sin que oficialmente se haya declarado extinta la Comisión, sabemos que ya no es posible porque se acaba la legislatura en marzo».
Doctrina del Constitucional
El presidente de la Asamblea explica que el Tribunal Constitucional se ha pronunciado a favor de incluir derechos propios siempre y cuando se refieran a las competencias de cada comunidad autónoma. «En el catálogo hay derechos sui generis porque la doctrina del Constitucional dice que es posible. Muchos comparecientes en la Comisión, como los sindicatos, nos aconsejaron que incluyéramos ese catálogo de derechos y luego cada grupo hará sus propuestas. Los servicios de la Cámara ha realizado un estudio comparado con otras comunidades autónomas».
Celdrán apostilla que la Comisión para la reforma del Estatuto ya no se va a convocar porque la actividad de la Asamblea acaba en marzo, y antes está el debate de los presupuestos autonómicos.