Los dos bancos firman un acuerdo sin precio, aunque el grupo catalán pondrá 350 millones de euros para nivelar el balance de Caixa Penedés
19.12.12 - 00:56 -
M. BUITRAGO | MURCIA./ La Verdad
A 48 horas para que la Comisión Europea se pronuncie sobre el plan de reestructuración de BMN, el grupo presidido por Carlos Egea Krauel cerró ayer el acuerdo con el Banco Sabadell para transferir el negocio de Caixa Penedés. El grupo liderado por Cajamurcia se desprende de su red en Aragón y Cataluña para reducir las necesidades de capital adicional en unos 600 millones de euros, que representa más de la cuarta parte del déficit de 'resistencia' de 2.208 millones detectado en el informe Oliver Wyman. Con un apretón de manos de Egea y José Oliu en Madrid ha culminado una operación poco usual en el sistema financiero español y europeo, ya que desde hace diez años no se traspasaba el negocio financiero de un banco a otro, según fuentes del sector.
No hay precio en la transacción, aunque sí una compensación de 350 millones de euros que tendrá que aportar Banco Sabadell para equilibrar el pasivo de Caixa Penedés con los activos netos cubiertos con provisiones. La UE también tiene que aprobar esta operación, que está ligada al plan de reestructuración y capitalización de BMN, que prevé además la capacidad de generación interna de recursos propios. Está previsto que el comisario de la Competencia, Joaquín Almunia, comunique mañana las condiciones impuestas a BMN para que siga con su plan de viabilidad, que incluye una inyección directa de 700 millones de euros por parte del FROB durante 5 años.
Libre de 'tóxicos'
La segregación del negocio de BMN en Cataluña y Aragón supone perder el 28% del grupo constituido hace dos años, que corresponde a la participación de Caixa Penedés. Cajamurcia tenía hasta ayer el 41%, Caja Granada el 18% y Sa Nostra el 13%. Banco Sabadell y Banco BMN notificaron el acuerdo una vez efectuada la 'due diligence', según informaron ambas entidades a la CNMV. Con esta operación, el grupo que preside Oliu impulsará su negocio de banca minorista en su territorio de origen y se situará asimismo como cuarta entidad en Cataluña, con una cuota de oficinas cercana al 12%.
El negocio de Caixa Penedés incluye una inversión crediticia por 10.600 millones de euros y depósitos de clientes por 7.900 millones. Estos activos corresponden a los de la red en Cataluña y Aragón, una vez excluidos los transferidos por BMN al 'banco malo'. Es decir, la parte que asume Sabadell está limpia de activos tóxicos.
El acuerdo comprende un perímetro de 462 oficinas (443 en Cataluña y 19 en Aragón) y el negocio de los 900.000 clientes, así como los 2.000 empleados adscritos a esta red y a los servicios centrales de dicha dirección. El importe de la diferencia entre los activos netos, cubiertos adecuadamente por sus correspondientes provisiones, y los pasivos incluidos en el acuerdo se compensará por 350 millones de euros. La operación se ha realizado bajo las premisas pactadas en el Memorandum de Entendimiento, firmado el pasado 13 de noviembre, y está sujeta al cumplimiento de las condiciones suspensivas y regulatorias.
El presidente de Banco Sabadell, José Oliu, ha subrayado que se trata de una operación «muy interesante para nuestra entidad, por cuanto supone la incorporación de una red de oficinas consolidada y bien distribuida en Cataluña, que complementa la de su entidad y que le permitirá acceder a la práctica totalidad de sus clientes o potenciales clientes en este territorio».
El Sabadell, por otra parte, ha vendido la totalidad de su participación en el capital social del grupo de alimentación valenciano Natra por algo más de 2 millones de euros.