JULIÁN MOLLEJO JMOLLEJO@LAVERDAD.ESMURCIA.
La dirección del PSRM exime a los candidatos de toda culpa y asume la responsabilidad por los malos resultados La secretaria de Igualdad presenta su dimisión, pero el resto de la ejecutiva condiciona los cambios a las primarias y a las próximas elecciones
La debacle electoral sufrida por el PSOE en la Región de Murcia el pasado domingo ya tiene su primera víctima: Gloria Martín, la secretaria de Igualdad de la ejecutiva regional del partido, que ayer presentó su dimisión en el transcurso de la reunión de la dirección socialista en la que analizaron los resultados del 22-M.
De momento no se esperan más dimisiones. La ejecutiva, fiel a las directrices de la dirección federal, anunció que adoptará los «cambios necesarios», entre los que cita la revisión de estrategias, proyectos, organización y modos de trabajo, y que los «relevos de las personas no serán un obstáculo», pero todo lo condiciona al calendario que marque la dirección nacional.
El sábado se reúne en Madrid el Comité Federal para convocar las primarias que elijan al sucesor de Rodríguez Zapatero en las elecciones generales del próximo año. Para el PSOE estas dos citas son prioritarias, y todas las federaciones regionales deben supeditar cualquier movimiento a ellos.
El comunicado difundido por la ejecutiva tras la reunión de ayer dice ser consciente «del tamaño y de la gravedad de la derrota», y afirma «tener la intención de actuar en consecuencia». La dirección que lidera Pedro Saura achaca a la crisis económica las causas del hundimiento del partido en toda España y asume toda la responsabilidad, al tiempo que exime de ella a los candidatos.
En la sede regional del partido ayer fue un día de duelo. Reinaba el desconcierto y la incertidumbre. Las reflexiones de urgencia de algunos dirigentes insistían en otorgarle todo el mérito de la debacle a la estrategia del PP de presentar las elecciones locales y autonómicas como la antesala de las generales.
El hecho de que los malos resultados se hayan registrado en las trece comunidades autónomas donde hubo elecciones y que ni siquiera la Región de Murcia es en la que el PSOE más votos y escaños ha perdido fue utilizado por varios miembros de la ejecutiva para justificar que el problema no es exclusivo de Murcia.
En la dirección regional fueron conscientes de la debacle que se avecinaba el pasado jueves, cuando recibieron información de la ejecutiva federal de que la último sondeo reflejaba que la campaña estaba resultando inútil y que no sólo no movilizaban el voto de los indecisos, sino que además estaban perdiendo el de antiguos electores.
