Ayuntamiento de Murcia
El Gobierno Regional, a través de la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas, va a poner a disposición de los ayuntamientos una línea especial de financiación de hasta 300 millones de euros a partir de 2011 para que los municipios puedan hacer frente al gasto corriente.
El anuncio lo han hecho la Consejera del área, María Pedro Reverte, y el Alcalde de Murcia y Presidente de la Federación de Municipios de la Región, Miguel Ángel Cámara, al término de la reunión de la comisión ejecutiva de este organismo.
Se tratará de un “plan de rescate a la carta” atendiendo a la situación financiera particular de cada municipio y tendrá carácter “incondicionado”, no finalista, para que sea cada ayuntamiento el que decida para qué destina esos fondos, ya sea para gastos de funcionamiento o para inversiones.
De modo orientativo, los municipios cuya población supera los 50.000 habitantes podrían disponer de hasta 15 millones de euros cada uno, en función de las necesidades económicas que precisen.
La propuesta, sin embargo, tiene que salvar una dificultad derivada del Real Decreto que aprobó el Gobierno de la Nación mediante el cual se prohíbe a las entidades locales acudir a créditos para financiar inversiones en 2011.
A este respecto, la comisión ejecutiva de la FMRM ha aprobado por unanimidad instar al Presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, a que remita una carta al Vicepresidente tercero del Gobierno solicitando una reunión urgente para tratar sobre este asunto. El objetivo es impulsar las modificaciones legislativas precisas que permitan que las comunidades autónomas concedan avales crediticios que alivien la situación de asfixia financiera de los ayuntamientos.
La creación de este fondo incondicionado se suma a otras medidas facilitadas por el Gobierno Regional ya en vigor, como el incremento de la dotación destinada a gasto corriente de los ayuntamientos y la eliminación de la cofinanciación municipal en determinadas actuaciones, de tal modo que obras subvencionadas por la Comunidad Autónoma no tengan que contar también con fondos locales.
El Gobierno Regional, a través de la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas, va a poner a disposición de los ayuntamientos una línea especial de financiación de hasta 300 millones de euros a partir de 2011 para que los municipios puedan hacer frente al gasto corriente.
El anuncio lo han hecho la Consejera del área, María Pedro Reverte, y el Alcalde de Murcia y Presidente de la Federación de Municipios de la Región, Miguel Ángel Cámara, al término de la reunión de la comisión ejecutiva de este organismo.
Se tratará de un “plan de rescate a la carta” atendiendo a la situación financiera particular de cada municipio y tendrá carácter “incondicionado”, no finalista, para que sea cada ayuntamiento el que decida para qué destina esos fondos, ya sea para gastos de funcionamiento o para inversiones.
De modo orientativo, los municipios cuya población supera los 50.000 habitantes podrían disponer de hasta 15 millones de euros cada uno, en función de las necesidades económicas que precisen.
La propuesta, sin embargo, tiene que salvar una dificultad derivada del Real Decreto que aprobó el Gobierno de la Nación mediante el cual se prohíbe a las entidades locales acudir a créditos para financiar inversiones en 2011.
A este respecto, la comisión ejecutiva de la FMRM ha aprobado por unanimidad instar al Presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, a que remita una carta al Vicepresidente tercero del Gobierno solicitando una reunión urgente para tratar sobre este asunto. El objetivo es impulsar las modificaciones legislativas precisas que permitan que las comunidades autónomas concedan avales crediticios que alivien la situación de asfixia financiera de los ayuntamientos.
La creación de este fondo incondicionado se suma a otras medidas facilitadas por el Gobierno Regional ya en vigor, como el incremento de la dotación destinada a gasto corriente de los ayuntamientos y la eliminación de la cofinanciación municipal en determinadas actuaciones, de tal modo que obras subvencionadas por la Comunidad Autónoma no tengan que contar también con fondos locales.