07.03.13 - 01:14 -
EDUARDO RIBELLES | CARTAGENA./ La Verdad
Ni el vicepresidente del Gobierno regional y consejero de Economía y Hacienda, Juan Bernal, ni el Grupo Popular, que sustenta al Ejecutivo autonómico, quisieron recoger ayer el guante lanzado por el PSOE, en la Asamblea Regional, y pedir explícitamente al Ministerio de Hacienda que rebaje el objetivo de déficit fijado en el 0,7% del PIB regional para finales de este año, después de haber doblado el de 2012 al llegar al 3,02%.
El diputado socialista Alfonso Navarro les pidió en el Pleno que se planten y exijan al Ministerio de Hacienda al menos un año más para cumplir con la ley de Estabilidad Presupuestaria. Su grupo ofreció al PP un acuerdo en forma de declaración institucional unánime, con el concurso de IU, para que el Gobierno regional solicite al central una mayor flexibilidad. Pero Bernal se limitó a manifestar una total confianza en que la relajación del objetivo de déficit llegará de Madrid por sí sola, en cuanto la Unión Europea rebaje sus exigencias para el conjunto del Estado.
En el PP también prefieren esperar. «No se aceptan propuestas hechas sobre la marcha durante un Pleno, como ha ocurrido con ésta», indicó el portavoz popular, Juan Carlos Ruiz. A continuación, añadió que los populares no apoyarán nada que pueda ser contraproducente, aunque sea para lograr algo en lo que no están en desacuerdo.
Fracaso, milagro y dimisión
«Lo que no pueden pretender ustedes es que haga milagros: que no recorte, que reduzca el déficit, que mantenga los servicios públicos y que invierta en reactivar la economía», apuntó Bernal. «Y si quieren pedir mi dimisión, están en su derecho, pero no les admitiré reproches improcedentes y tampoco me parece bien que al mismo tiempo carguen las culpas en el presidente Valcárcel. Si yo soy el responsable, es a mí a quien deben reprocharle lo ocurrido», añadió Bernal, que encajó mal las alusiones del diputado de IU-V, José Antonio Pujante.
El consejero reconoció que la liquidación de las cuentas de 2012 arroja tres puntos porcentuales de déficit porque los ingresos fueron muy inferiores a los esperados, pese a que «se logró ahorrar 36 millones de euros más de lo previsto en las partidas de gasto».
Y al recordar lo que ha fallado en los ingresos dio pistas de lo que no cree que vaya a funcionar de cara al futuro y probablemente no se incluya en el nuevo plan de reequilibrio. Según su análisis, ha influido el escaso efecto del plan de venta de inmuebles, que solo permitió ingresar 17 millones y no los 57 previstos. También fallaron las previsiones de ingresos tributarios, que fueron 53 millones menores de lo consignado, y las transferencias del Estado, 86 millones por debajo de lo presupuestado.
Además, a juicio de Bernal, el estado de cuentas de la Comunidad se ve lastrado desde hace cuatro años por «un sistema de financiación que nos ha dejado sin 3.000 millones de euros que nos correspondían». Pese a todo ello, aseguró que la nave «va en la buena dirección. Solo necesitamos un poco más de tiempo para llegar a buen puerto», añadió. Ahora bien, Bernal no quiere significarse con la petición expresa de esa prórroga.