El magistrado decreta su ingreso en prisión, mientras que el amigo que alquiló la vivienda en la que se refugió queda en libertad con cargos
La Verdad
El juez mandó ayer a prisión a José L. H., el 'Dioni de Molina', por el presunto robo de 500.000 euros de una oficina de la CAM de Yecla en la que trabajaba. El acusado, que fue detenido el viernes en Badajoz, donde se había escondido, acudió a las diez de la mañana a prestar declaración ante el juez de instrucción, escoltado por la Policía Nacional. El magistrado decretó su ingreso en la cárcel y declaró el secreto de sumario.
También el amigo que alquiló el piso de Badajoz en el que se refugió el 'Dioni de Molina' prestó ayer declaración, aunque en este caso en Murcia. El juez lo dejó en libertad con cargos. La Policía Nacional lo detuvo el jueves en Molina de Segura. Los agentes encontraron en su poder 9.000 euros en metálico que presuntamente forman parte del botín que José L. H. supuestamente sacó de la oficina de la CAM en la que trabajaba. Habría entregado esos 9.000 euros a su amigo por ayudarle a gestionar el alquiler de la vivienda en Badajoz.
El resto del dinero se lo habría quedado el presunto autor del robo. En total, el 'Dioni de Molina' sacó de la sucursal medio millón de euros. Los agentes de la Brigada de la Comisaría Provincial de Badajoz encontraron el viernes, en la vivienda en la que se había refugiado, cerca de 100.000 euros.
Con barba
José L. H. cambió su aspecto para intentar pasar desapercibido, como muestran las fotografías que se le tomaron ayer a su llegada a los juzgados de Badajoz. Se dejó una barba que no impidió a los agentes identificarlo la semana pasada. Pese a que apenas salía de la vivienda, situada en el centro de la capital extremeña, la Policía fue atando cabos. El paso fundamental fue la detención de su amigo y colaborador el pasado jueves. Un día después, los agentes daban con el 'Dioni de Molina'.
El presunto ladrón nunca viajó a Venezuela, como se especuló en un principio. El robo se produjo el 20 de abril. Su fuga terminó en Badajoz, y no ha durado ni dos meses.